La cultura en América Latina durante el año que pasó, como todo en nuestras vidas, estuvo marcada por la pandemia y la falta de espacios para el encuentro. Creadores que debieron buscar nuevas formas y tecnologías, públicos que consumieron casi sin límites propuestas online y plataformas que se disputan el mercado mundial y hegemonizan tanto la producción como las pantallas domiciliarias. En ese marco, las formas de cultura popular siguen batallando por encontrar su lugar.