Santos hace un balance de sus seis años de gobierno con la meta de lograr la paz

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En una alocución dirigida a todo el país, el presidente Juan Manuel Santos hizo este lunes un balance de los logros alcanzados por su gobierno durante seis años de mandato e hizo un llamado a la unidad en un momento tan determinante como lo es la transición hacia el fin del conflicto que, aseguró, está cada vez más cerca.

«El viernes pasado se acordaron todos los protocolos para que este grupo armado se concentre y le entregue la totalidad de sus armas a las Naciones Unidas. Esto significa ni más ni menos el fin de las FARC. Así como lo oyen: el fin de las FARC, porque dejarán de ser un grupo armado», aseguró el jefe de Estado.

Asimismo, el mandatario calificó como una gran noticia la llegada de delegados de las Farc, el gobierno y Naciones Unidas a las zonas en donde se realizará el proceso de concentración y desarme de la guerrilla, manifestando que se trata de avances ciertos y concretos hacia el fin del conflicto.

Santos también se refirió a la convocatoria para el plebiscito por la paz y explicó que apenas termine la discusión de los puntos pendientes y desde La Habana se anuncie que todo ha sido acordado «se publicarán los textos definitivos de los acuerdos, se los enviaré al Congreso y convocaré el plebiscito. Daré así cumplimiento a la promesa que les hice: que el pueblo soberano –es decir, ustedes, queridos compatriotas– tendrán la última palabra sobre el futuro de la paz», agrego haciendo un llamado a los colombianos para que voten con responsabilidad.

«Se trata de la votación más importante de nuestras vidas. Nadie puede ser indiferente frente a esta oportunidad de acabar con una guerra que nos ha hecho sufrir tanto y nos ha desangrado por más de cincuenta años», refirió al insistir en que el fin del conflicto es tan solo un paso para la construcción de la paz. «Es el momento de unirnos, con alegría, con fe en ese mejor futuro que le podremos dejar a nuestros hijos», puntualizó.

Los logros

Durante su intervención el presidente Santos explicó que su gobierno ha concentrado esfuerzos en tratar de mejorar el bienestar de los colombianos y que, en ese camino, los logros han sido varios. «El 95% de los niños están siendo protegidos con todas las vacunas. En eso somos los más avanzados de toda América Latina. Se decretó la educación gratuita desde el grado cero hasta el grado once en todos los colegios públicos, lo que nos ha permitido educar sin costo para los padres a 8 millones 700 mil menores cada año», explicó.

De igual forma, añadió que en materia de empleo los avances han sido determinantes pues se ha logrado crear más de 3 millones 100 mil empleos, reduciendo la tasa de desocupación a un dígito. «Pero tenemos que hacer mucho más porque todavía hay más de 2 millones de colombianos buscando trabajo», sostuvo.

Respecto al tema de vivienda, Santos insistió en que durante su mandato se han construido 1 millón 200 mil viviendas, de las cuales 130 mil fueron gratis, para los más pobres. «Todo lo anterior ha contribuido al que es sin duda uno de los logros más significativos y más satisfactorios de estos últimos años: haber logrado reducir la pobreza extrema a la mitad y haber sacado a 4,6 millones de compatriotas de la pobreza», agregó.

También fueron motivo de mención los contundentes golpes que en los últimos años ha propinado la Fuerza Pública a diferentes organizaciones armadas ilegales y que han permitido que los índices de homicidios y secuestros lleguen a los niveles más bajos de los últimos 40 años.

Los retos

El jefe de Estado reconoció que si bien los avances que se han dado en diferentes aspectos han sido fundamentales para el país, existen necesidades y problemáticas que siguen sin resolverse: “Hay todavía demasiada pobreza, demasiado desempleo, demasiada inseguridad y demasiada inequidad”.

De hecho, Santos aseguró que en los dos años que le quedan de mandato, dedicará sus esfuerzos no solo a la consolidación de la paz, sino a trabajar más para reducir las brechas de pobreza en las regiones y convertir a Colombia en el país más educado de la región para el 2025.

“La lucha contra la corrupción merece una mención especial porque aquí tenemos que avanzar con más contundencia, y personalmente, junto con el nuevo Fiscal –como lo hemos convenido– nos pondremos al frente de este desafío. Todo esto dentro de una situación económica difícil debido a la muy adversa situación internacional y a la baja del precio del petróleo que nos golpeó tan duro. Son circunstancias complejas que se han manejado con acierto y responsabilidad, como bien lo señalan todos los analistas internacionales”, concluyó el mandatario.

El Espectador


Esto es lo que falta para acordar la paz con las Farc

A partir de la próxima semana, muchos colombianos podrán ser testigos de cómo integrantes del Gobierno Nacional, las Farc y las Naciones Unidas emprenderán juntos un recorrido para verificar los territorios en los cuales se asentarán al menos durante seis meses los hombres y las mujeres que se desmovilicen de esa guerrilla. Lea también: Diez preguntas clave sobre el protocolo de la dejación de armas

Ese momento hace parte de lo que se ha denominado la etapa del cese el fuego y de hostilidades bilateral y definitivo y la dejación de las armas, que fueron los aspectos centrales que dieron vida al gran acuerdo que la mesa de negociación anunció el pasado 23 de junio desde La Habana, en presencia del presidente Juan Manuel Santos y del jefe de las Farc, Rodrigo Londoño, alias Timochenko.

Sin embargo, para completar ese camino que llevará al fin del conflicto armado con la organización guerrillera se deberá haber alcanzado la firma definitiva de los acuerdos, según lo anunciaron el pasado viernes los negociadores por parte de la subversión.

Entonces sí podrá convertirse en realidad la frase que el jefe de Estado, Juan Manuel Santos, ha esgrimido desde el inicio de las conversaciones con las Farc, en noviembre del 2012: “Nada está acordado hasta que todo esté acordado”.

Incertidumbre

Acabar un conflicto armado que lleva más de 50 años no es fácil, de ahí que ya sean muchos los incumplimientos de fechas que se han dado como culminación total del proceso de paz.

En este momento la negociación entre las partes ya ha superado prácticamente toda la agenda, quedan solamente temas que son de suma coyuntura, en especial para las Farc.

Por un lado, están aspectos correspondientes a la seguridad jurídica, como lo recordaron el viernes ‘Iván Márquez’ y ‘Carlos Antonio Lozada’, quienes al referirse al significado de 36 protocolos suscritos con el Gobierno Nacional para llegar al desarme, entre otros aspectos, pidieron que se cumpla lo acordado en ese tema.

Gobierno y guerrilla discuten también quiénes serán los magistrados que integrarán el tribunal de la justicia transicional pactado para que juzgue a todas las personas involucradas en el conflicto armado, incluidos los desmovilizados.

Pero igualmente siguen sobre la mesa de conversaciones el alcance que se le dará al indulto que requerirá gran parte de los integrantes de la guerrilla,incluidos algunos de sus jefes.

Un asunto más, que no es de menor importancia, es la elegibilidad política a la que tendrán derecho, es decir si al estar ya en la vida civil podrán llegar al Congreso de la República con curules asignadas o si deberán esperar a ganarlas a voto limpio en las elecciones programadas para el 2018.

Ante la complejidad de estos asuntos, el presidente Santos esgrimió una nueva teoría sobre los tiempos del proceso, con el fin de lograr que la votación del plebiscito sea antes de finalizar octubre. Aseguró que tan pronto se superen los llamados pendientes de la agenda, convocará la refrendación y que la firma protocolaria se dará luego.

La tesis del Mandatario fue corroborada en parte por la Corte Constitucional, al precisar que la Ley de Plebiscito que revisó no obliga a que el Jefe del Estado haya firmado los textos definitivos para citar a los colombianos a las urnas.

Cumbre guerrillera

Incierta también por el momento es la fecha que definirán las Farc para realizar su conferencia nacional, la cual, según el analista Ariel Ávila, es como el plebiscito de la guerrilla, por cuanto será el escenario donde se oficializará a toda la militancia que los acuerdos con el Gobierno no tiene reversa.

El propio jefe de la subversión, Rodrigo Londoño, reconoció que se están preparando para esa cumbre, que es fundamental para las Farc. También el Presidente ha dicho que en su momento se coordinará con las Fuerzas Militares y la Policía las medidas de seguridad que requieren los guerrilleros para su desplazamiento.

Por el Sí o por el No

Mientras se afinan los últimos detalles en La Habana, que los más optimistas proyectan para un lapso de tres semanas, la dirigencia política en Colombia ya está metida de lleno en la campaña para impulsar o rechazar la aprobación de los acuerdos de paz mediante el plebiscito.

Sin embargo, ya se cumplieron tres semanas desde que la Corte Constitucional avaló la ley de refrendación, pero el fallo no ha sido publicado, lo que tiene frenado al Consejo Nacional Electoral para reglamentar la forma en que se harán las campañas por el Sí y por el No, además de la pedagogía por parte del Gobierno que, si bien es muy similar, se deberá presentar a los colombianos de forma diferente.

Ante ese vacío temporal es que ya se avanza de lleno en las campañas.
Por el Sí está el expresidente César Gaviria Trujillo, como gran coordinador, sumado a todos los partidos que acompañan al Gobierno en el proceso de paz.

Por el otro lado está el expresidente Álvaro Uribe Vélez, quien ya formalizó que hará campaña por el No y designó a sus dirigentes Óscar Iván Zuluaga, Carlos Holmes Trujillo e Iván Duque como los promotores nacionales de la oposición a los acuerdos.

La amnistía, el escollo

”Es cierto que la seguridad jurídica de la tropa rasa y mandos medios es muy importante para no repetir lo sucedido con las AUC, pero debe quedar claro que, la a luz del Estatuto de Roma, bajo el cual se está negociando con las Farc, no se pueden amnistiar delitos atroces, y en esa medida los máximos responsables no pueden ser amnistiados, afirmó Eduardo Álvarez Vanegas, del área de Negociaciones de la Fundación Ideas para la Paz, FIP.

”Si uno se pone bajo el supuesto de que la amnistía es una condición de fin del conflicto, entonces esto está envalentonando las versiones más extremas de los opositores que dicen que este es un proceso de impunidad. Van a tener que encontrar fórmulas para que quienes no hayan incurrido en delitos de lesa humanidad y no sean máximos responsables puedan tener amnistías especiales para garantizar su ruta de reincorporación, y que los que sí son máximos responsables de crímenes atroces sí se sean sujetos de la Jurisdicción Especial para la Paz”, agregó antes de precisar que “no se le puede enviar el mensaje al país de que estas personas van a recibir amnistía”.

El Pais

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