El feminismo popular alza la voz por la libertad de Milagro Sala y las y los presos políticos en Jujuy – Por Frente de Mujeres Tupac Amaru
El feminismo popular alza la voz por la libertad de Milagro Sala y las y los presos políticos en Jujuy
Por Frente de Mujeres Tupac Amaru
La ciudad de San Salvador de Jujuy, será sede, entre el 11 y el 13 octubre del 37° Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Travestis, Trans, Bisexuales, Intersexuales y No Binaries en Jujuy, al norte de Argentina y levantará sus banderas por la libertad de Milagro Sala y las y los presos políticos de esta provincia.
Jujuy es un territorio con una larga historia de lucha y organización, donde la Tupac fuimos y somos pilar de la construcción de una sociedad con Justicia Social. Por ello, el Gobierno Provincial junto a los poderes concentrados lo han convertido a lo largo de los últimos años en un laboratorio de persecución, disciplinamiento y saqueo al Pueblo.
Milagro es una militante popular que trabajó desde muy joven con una sola idea: construir dignidad para su pueblo. Lidera una organización barrial integrada mayoritariamente por mujeres que generó un esquema educativo de gestión social para la formación de calidad, organizó las comunidades para la instalación de 600 copas de leche, para paliar el hambre de los más humildes. También impulsa cooperativas de trabajo que aseguran un salario digno, que permitan aprender un oficio y que han logrado la autoconstrucción de 8.000 viviendas. La Tupac, construyó 23 polideportivos, escuelas, 23 fábricas textiles, metalúrgicas y bloqueras, 13 centros de salud, un centro de rehabilitación para la atención de personas con discapacidad y las famosas piletas en las que miles de niñeces pudieron acceder a vacaciones dignas hasta que fueron usurpadas por el gobierno de Gerardo Morales en 2018. La Tupac Amaru, no hay que olvidarlo, se convirtió en la tercera fuente de generación de empleo de la provincia de Jujuy, junto al Estado provincial y el ingenio Ledesma, reactivando el consumo e impactando de lleno en la economía local.
Co-gestionó políticas de justicia social con el Estado Nacional, Provincial y Municipal para beneficiar a los sectores más vulnerables.
Desafió múltiples poderes como el imperio azucarero Ledesma, conocido en la región por el rol que jugó durante la ultima dictadura cívico militar en Argentina, denunciando a sus trabajadores y proporcionando vehículos para que las Fuerzas Armadas se los llevaran en medio de apagones de luz.
Gracias a la movilización conjunta de organismos de DDHH y la Tupac, con marchas de más de 100 mil compañeros y compañeras se logró llevar a juicio al dueño del ingenio azucarero, Carlos Blaquier, en 2012.
La Tupac, puso en práctica una de las banderas del peronismo: la justicia social, pero con un plus: siendo inclusiva y feminista. Por eso la persiguen y pretenden desguazar la organización. También hoy, muchos miran para otro lado. El poder popular, real, en acción, asusta.
La expansión del laboratorio represor
En 2016 se activó en Jujuy el laboratorio represivo, con la puesta en práctica de un caso concreto de lawfare: la justicia, en complicidad con los poderes locales persiguió y encarceló a nuestra compañera Milagro.
En 2019, Jujuy fue el escenario clave donde el gobernador Morales desplegó su complicidad con la organización y concreción del golpe de Estado al Gobierno Plurinacional y Popular de Bolivia. Este plan contó con la visita a la provincia de Ivanka Trump como Asesora presidencial, en el día de la Mujer Indígena, junto al Secretario de Estado Adjunto, John Sullivan y el Administrador de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), Mark Green. Luego la Embajada y el Gobierno de Macri concretaron el apoyo armado a la derecha boliviana.
Estos hechos no son casualidad, en una provincia que es una de las mayores reservas de litio de la región, junto con Bolivia y Chile.
A lo largo de los años se profundizó la organización de un narco Estado en la provincia, donde la persecución a la militancia y a los trabajadores mediante el código de faltas llegó a su punto cumbre a principios de 2023 durante la aprobación, a puertas cerradas, de la Reforma Constitucional provincial. Tal reforma, fuertemente resistida por el movimiento popular jujeño, propone, entre otras cosas, condiciones preocupantes sobre temas ambientales, incluyendo el régimen de aguas, de exploración y explotación ambiental sin el ejercicio de consulta, participación y de propiedad territorial de los pueblos originarios.
Durante las protestas el pueblo jujeño fue duramente reprimido y disciplinado, con disparos de balas de goma a los ojos y detenciones ilegales, llevadas adelante por personas y vehículos no identificados.
El feminismo popular como principio
La Tupac puso en juego principios del feminismo popular: empoderó a mujeres y diversidades mediante la organización. Entendió que las mujeres y diversidades son sujetas de derecho, y por ende sujetas de acción y transformación, hacedoras de dignidad para sus vidas y comunidades, comprendió que la política se construye desde y con los y las compañeras, ya que nadie mejor que quienes habitamos las barriadas para gestionar cómo decidimos vivir. Armó habitad social, en el country de la Tupac salíamos de nuestras casas fruto de procesos de autoconstrucción y a tres cuadras estaba la fábrica donde nos desarrollamos como trabajadores, el centro médico, el centro cultural, las piletas y las plazas hermosas y bien cuidadas para la recreación y ocio.
Mediante cooperativas de trabajo, de construcción y metalúrgica rompió con la hegemonía de los oficios masculinizados. Generó estrategias de protección, atención y salidas de las violencias por razones de género, abrazó y afirmó una idea de diversidad sexual y de multiplicidad de deseos.
A más de 8 años de presa política, Milagro Sala sigue siendo víctima del poder judicial de Jujuy. Un poder patriarcal, racista y oligárquico. Por eso denunciamos que nuestra compañera está detenida sufriendo violencia política, institucional, mediática y simbólica.
En este 37 Encuentro Plurinacional no es posible hablar de Feminismo Popular, de Justicia Social, ni de eliminación de las violencias contra las mujeres sin integrar, sin mirar, sin bancar, sin gritar por la libertad de Milagro y lxs presxs y perseguidxs políticxs de Jujuy.