Maternidad y seguridad social en el caribe
Por Lourdes Jimenez Brito *
Para la Conferencia Interamericana de Seguridad Social (CISS) la maternidad en un sentido amplio es uno de sus ejes prioritarios de políticas. La CISS ya ha propuesto que la maternidad se considere un riesgo social.(1) Ruezga Barba define los riesgos sociales como ciertos riesgos o contingencias que afectan la salud, la vida, la capacidad laboral y los ingresos eco-nómicos necesarios para llevar una existencia digna.(2) Si entendemos que la maternidad impacta directamente todas las áreas mencionadas, entonces es razonable demandar que la seguridad social brinde servicios y transferencias con dos objetivos: que den seguridad a las mujeres y que compensen los costos y contingencias a las que se enfrentan cuando son madres. Esta Conferencia ha remarcado que la maternidad debería ser asumida de manera responsable y libre por las mujeres de todo el continente sin que haya circunstancias ajenas que las obliguen a enfrentarla.(3) Esto supone que las mujeres puedan ser protagonistas de sus decisiones reproductivas con libertad y que cuenten para ello con amplias garantías de protección dentro de un esquema de seguridad social estatal.
En esta Nota técnica se analizan las condiciones bajo las cuales las mujeres del Caribe anglosajón y algunos países del Caribe latino ejercen la maternidad.(4) Nuestra contribución se orienta a hacer recomendaciones específicas a los países miembros de esta Conferencia con el objetivo de lograr la máxima cobertura de seguridad social en el componente de maternidad y políticas familiares para que todas las familias de la región puedan gozar de bienestar. El Caribe presenta retos particulares para su estudio, que se han traducido en un conocimiento limitado sobre la realidad que experimentan sus países y territorios autónomos. Por esta razón no debería sorprendernos lo poco que se conoce acerca del nivel de protección de las mujeres frente al riesgo social de la maternidad, en particular sobre las políticas de acceso a servicios de salud reproductiva y materna, licencias familiares o disponibilidad de servicios de cuidados infantiles. Con este trabajo queremos contribuir al conocimiento focalizado de las políticas de maternidad en la región.(5)
Lejos de ser una novedad en cuanto a políticas, las prestaciones de maternidad han sido un componente histórico de la seguridad social en todo el mundo. Sin embargo, las políticas públicas no son neutrales y aquellas dirigidas a proteger la maternidad corren el riesgo de cristalizar roles de género arraigados en nuestras sociedades que afectan negativamente la dignidad, la libertad y la igualdad de las mujeres. Los esquemas tradicionales de protección de la maternidad han condicionado a las madres a permanecer en el espacio doméstico, donde ejercen las funciones de cuidado y crianza mientras los padres continúan en el ámbito productivo sin que sus ingresos y actividades se vean afectados. Por estas razones, en la Conferencia se ha diseñado un modelo de seguridad social de maternidad que promueve una deconstrucción de los roles de género en el cuidado y la crianza de la infancia. Se trata de una política pública familiar con enfoque de género y de derechos que busca proteger a las mujeres del riesgo social de la maternidad y compensar con medidas efectivas los costos diferenciales que asumen en el momento de ser madres. La corresponsabilidad y la igualdad supone amplios beneficios para las familias, la sociedad y la economía. Por eso es hora de redefinir los términos de un verdadero modelo institucional de maternidad.(6)
Este documento se divide en cuatro secciones. Primero examinamos los retos metodológicos de estudiar los países y territorios que conforman el Caribe angloparlante. Una de las razones principales que explican el poco conocimiento que hay en torno a ellos es la falta o inexistencia de datos e información confiables. En segundo lugar, describimos brevemente los sistemas de seguridad social del Caribe y hacemos énfasis en los componentes de maternidad y políticas familiares. El objetivo es tener una idea general del nivel de protección que se ofrece en estos países y territorios a las mujeres frente al riesgo social de la maternidad. Se verá que las mujeres acceden, en promedio, a un nivel de protección menor que las mujeres que son madres en América Latina en algunas categorías críticas como políticas de licencias familiares y disponibilidad de servicios de cuidados infantiles. En tercer lugar, elaboramos un perfil de cada país y territorio a partir de cuatro categorías analíticas:
- Acceso a servicios de salud reproductiva y materna.
- Políticas de licencias familiares.
- Transferencias monetarias o en especies directas (en algunos casos ambas).
- Disponibilidad de servicios de cuidados infantiles.(7)
Por último, recomendaremos políticas específicas encaminadas a resignificar la maternidad desde una perspectiva pública, a partir del modelo desarrollado por la CISS.
El objetivo central de este documento es ofrecer a estos países y territorios una serie de políticas públicas orientadas a brindar las mejores condiciones para que las mujeres que sean madres puedan tener seguridad y bienestar a lo largo de esta etapa. El Estado es quien tiene la posibilidad de proporcionar las condiciones para que todas las personas —en este caso, todas las mujeres que deseen ser madres— puedan estar en la misma situación para emprender con libertad la búsqueda individual de la felicidad, es decir, para alcanzar el bienestar.(8) Esta pretensión puede traducirse como el acceso universal de todas las mujeres, sin importar su condición laboral, a un modelo de seguridad social estatal de maternidad.
Notas
1 – Renata Turrent Hegewisch, Aborto, maternidad y seguridad social, ciss, Ciudad de México, 2019. Disponible en https://ciss-bienestar.org/wp-content/uploads/2019/09/aborto-maternidad-seguridad.pdf
2 – Antonio Ruezga Barba, Seguridad social: una visión latinoamericana, ciess, Ciudad de México, 2009, p. 3.
3 – Renata Turrent Hegewisch, op. cit., 2019.
4 – Los países y territorios bajo estudio son: Anguila, Antigua y Barbuda, Aruba, Bahamas, Barbados, Belice, Islas Vírgenes británicas, Curazao, Dominica, Granada, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Trinidad y Tobago e Islas Turcas y Caicos, Cuba, Guadalupe, Haití y República Dominicana.
5 – Aunque se localizan en el Caribe, Cuba y República Dominicana suelen considerarse parte de América Latina, de acuerdo con criterios políticos, lingüísticos e históricos. Sin embargo, para los fines de este análisis serán incluidos en la selección. Alejandro Morlachetti, Current State of Social Protection Legislation in Barbados and the Organization of Eastern Caribbean States from a Human Rights Perspective, Fao, Roma, 2015.
6 – Lourdes Jimenez Brito, Maternidad y seguridad social, ciss, Ciudad de México, 2020.
7 – Las mismas categorías de análisis se emplearon en el cuaderno Maternidad y seguridad social, 2020.
8 – La ciss procura posicionarse como un organismo internacional con una teoría propia sobre el bienestar y un método particular para enfrentar los problemas que impiden una incorporación universal a la seguridad social, así como los factores que afectan el bienestar de las personas. Para más información, véase Hugo Garciamarín, Un ensayo sobre la felicidad y el bienestar, ciss, Ciudad de México, en prensa.
* Candidata a doctora en Ciencia Política por el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) de México. Miembro del equipo de especialistas de la Conferencia Interamericana de Seguridad Social (CISS). Especialista en políticas de maternidad y cuidados desde un enfoque de género y su relación con la seguridad social y el bienestar en la región de las Américas. Es licenciada en Ciencia Política, con una Especialización en Administración Pública y una Maestría en Derecho Constitucional.