Argentina: la colectiva Actrices Argentinas se organiza y denuncia abusos
«La impunidad para los abusadores debe terminar»
La Colectiva de Actrices Argentinas respaldó en conferencia de prensa la denuncia por violación de la actriz Thelma Fardin contra su colega Juan Darthes y advirtió que «Thelma pudo radicar la denuncia penal en la justicia, pero otras compañeras que narraron haber sido violentadas por el mismo sujeto, no pudieron avanzar judicialmente». Desde un teatro en la calle Corrientes, las actrices aseguraron que «esto recién empieza» y denunciaron a la Justicia por «obstaculizar, desestimar, demorar y estigmatizar a las víctimas», mientras habilita a los abusadores a «utilizar el sistema de justicia para disciplinarnos» bajo la figura de daños y perjuicios. También apuntaron contra los medios de comunicación «cómplices» que reflejan los aspectos «más morboso de los conflictos mientras acallan las problemáticas laborales de fondo».
El comunicado fue leído por diez de las más de 400 actrices que integran la colectiva de mujeres en el Multiteatro de calle Corrientes para respaldar la denuncia presentada por Fardin en Nicaragua ante la Unidad Especializada de delitos contra la Violencia de Género del Ministerio Público, debido a que ocurrió durante una gira en el país centroamericano. «Hoy decimos Basta. Escúchennos: el tiempo de la impunidad para los abusadores debe terminar», leyeron las actrices.
Dolores Fonzi, Nancy Duplaá y Julieta Ortega Adriana Salonia, Anabel Cherubito, Andrea Pietra, Belén Chavane, Dolores Fonzi, Griselda Siciliani, Jazmín Stuart, Julieta Cardinali, Julieta Díaz, Julieta Ortega, Julieta Zylberberg, Lali Espósito, Laura Azcurra fueron algunas de las que dijeron presente en esta acción fundacional de la colectiva, que nació al calor de la pelea por la legalización del aborto.
La carta completa de Actrices Argentinos
La colectiva Actrices Argentinas convoca a esta conferencia de prensa para acompañar la denuncia penal radicada en Nicaragua en la Unidad Especializada de delitos contra la Violencia de Género del Ministerio Público realizada por nuestra compañera Thelma Fardin contra Juan Darthes. Venimos trabajando, teniendo regularmente asambleas en las que reflexionamos sobre temas relacionados con nuestro oficio. Estas asambleas han dado un marco de contención para que podamos hablar y decir lo que nos pasa. Por eso hoy estamos acá.
Como ya sabemos, el movimiento de mujeres y otras diversidades sexuales se propone desterrar un régimen de violencia e impunidad sostenido tanto desde el estado, como en cada espacio donde se juegan relaciones de poder. Están presentes en nuestros trabajos y lugares de formación.
El precio que nos ha sido impuesto a la hora de desarrollarnos profesionalmente ha sido el de callar y someternos. Según una encuesta reciente de SAGAI, el 66% de les intérpretes afirmó haber sido víctima de algún tipo de acoso y/o abuso sexual en el ejercicio de la profesión. Se parece más a una norma que a una excepción. Porque, ¿a quién vamos a denunciar? ¿Al jefe de casting? ¿Al dueño de la productora? ¿Al director de la obra o película? ¿Al maestro de teatro?
Es sabido que éste es un fenómeno que ha sacudido internacionalmente a la industria del espectáculo y es funcional a ella. Hoy decimos Basta. Escúchennos: el tiempo de la impunidad para los abusadores debe terminar.
Las actrices somos ignoradas al denunciar y exponer los abusos. Se duda sistemáticamente de nuestras voces, de nuestros testimonios. En nuestro ámbito laboral se nos aísla frente a vivencias traumáticas que están naturalizadas, que llevan a veces años identificar y poner en palabras. Mientras tanto, el abusador habla, actúa y trabaja con total impunidad, y pretende hacer a la víctima responsable de su propio abuso.
En nuestro medio, la opresión y cosificación son moneda corriente. Se erotiza y sobreexpone a niñes y adolescentes en la industria del entretenimiento. Estamos casi siempre desprotegidas por quienes nos contratan. Por ejemplo, se envía a menores de edad de gira sin tutelaje suficiente y adecuado. En nuestro medio no hay protocolos de acción frente a casos de abuso; y la lista podría seguir es inmensa.
Necesitamos herramientas para enfrentar estas cuestiones que ademas se ven agudizadas por la precariedad laboral y la falta de trabajo. Contra todas esas formas de violencia y para que esto cambie, nos ponemos a trabajar desde hoy para dar esa batalla.
Donde la Justicia y el estado obstaculizan, desestiman, demoran, estigmatizan a las víctimas o fallan en forma aberrante a favor de los victimarios, como en el caso de Lucía Pérez, nos convocamos para decir basta. Porque el tiempo del silencio se terminó.
Asimismo, deploramos que algunos medios intenten llevar la atención hacia el costado más morboso de los conflictos mientras acallan las problemáticas laborales de fondo. Se vuelven cómplices. Le pedimos a la prensa responsabilidad en el seguimiento de este tema y de otros similares.
Los abusadores tienen el privilegio de utilizar el sistema de justicia para disciplinarnos. Buscan callarnos iniciando contra quienes se atreven a romper el silencio causas por Daños y Perjuicios o denuncias penales. Mientras las víctimas sufren las prescripciones, dilaciones, malos tratos y descreimiento por parte del aparato judicial.
Thelma pudo radicar la denuncia penal en la justicia pero otras compañeras que narraron haber sido violentadas por el mismo sujeto, no pudieron avanzar judicialmente.
La justicia no actúa con perspectiva de genero. Animarse a hacer una denuncia es un acto arriesgado cuando el poder judicial nos pone en el banquillo de las acusadas preguntando cómo nos vestimos, qué tipo de vida llevamos o si provocamos los ataques. Frente a este maltrato, está indiferencia y mordaza legal, las actrices nos organizamos.
Frente al «Mirá cómo me ponés», nosotras decimos «Mirá cómo nos ponemos». Nos ponemos fuertes, unidas, frente a tu violencia y tu impunidad, estamos juntas.
Que se haga justicia por nuestra compañera y por todes.
Esto recién empieza.
Juan Darthés se quedó sin abogada en su acusación contra Calu Rivero
Ana Rosenfeld, la abogada patrocinante del actor Juan Darthés, acusado por acoso sexual, anunció por Twitter que dejará de representarlo en la causa que le había iniciado en noviembre de 2017 contra Calu Rivero por calumnias e injurias, tras la denuncia de la actriz contra el actor por abuso. La renuncia de la letrada se produce el mismo día en que Actrices Argentinas brindará una conferencia para acompañar a las mujeres del ambiente que fueron víctimas de acoso sexual, en una versión local del «Me Too».
“Mañana presentaré en Tribunales mi renuncia al patrocinio letrado que ejercía en representación de Juan Darthés”, escribió la abogada, sin dar mayores precisiones, en la tarde del lunes.
Rivero había acusado a Darthés por abuso durante la grabación de escenas de la novela televisiva Dulce Amor, que compartieron en 2012.
En febrero de este año otras dos actrices, Ana Coacci y Natalia Juncos, se animaron a denunciar a Darthés, quien hasta hace poco protagonizó la novela Simona. El actor volvió a tomar la misma decisión de redoblar la apuesta y acusar de calumnias e injurias a las denunciantes. Sin embargo, en esas oportunidades Rosenfeld ya no quiso asumir la defensa del acusado. «Esas cuestiones no las puedo defender ni atacar. Yo no puedo opinar de algo que pasó hace muchos años, por eso como mujer en esas cuestiones di un paso al costado hasta que sea la justicia penal la que interrogue e investigue qué pasó, y por eso propuse a Fernando Burlando», dijo la abogada en declaraciones radiales.
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