Cierra el Foro de Sao Paulo con fuerte apoyo a Lula, Nicaragua y Venezuela

3.709

La izquierda sigue en pie de lucha en América Latina y el Caribe

En medio de una ofensiva de la derecha con sus políticas neoliberales y del recrudecimiento de las posturas hegemónicas de Estados Unidos, las fuerzas progresistas y de izquierda de Latinoamérica y el Caribe afirmaron aquí que siguen en pie de lucha.

Más de 600 delegados participantes en el XXIV Foro de Sao Paulo, celebrado del 15 al 17 de julio en el Palacio de Convenciones de La Habana, fijaron esa posición tras debatir en torno a la necesidad de la unidad como respuesta al actual escenario imperante en la región.

Jefes de Estado, exmandatarios, personalidades e intelectuales latinoamericanos y caribeños rechazaron en el regreso del Foro de Sao Paulo a Cuba, isla que lo acogió en 1993 y 2001, la tesis de la derrota de la izquierda y de la supremacía de la derecha, esgrimida a partir de golpes de Estado y de elecciones con resultados negativos para las fuerzas progresistas.

En ese sentido, la Declaración Final adoptada la víspera en el cierre de la reunión califica de absurda e inadmisible la idea de que en la región dominen las élites de poder promovidas por Estados Unidos.

Los partidos y agrupaciones integrantes del Foro creado en 1990 acordaron acciones para enfrentar la arremetida de la derecha, impulsar mecanismos de integración como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y combatir la injerencia de la Organización de Estados Americanos (OEA).

En los documentos emanados del XXIV Encuentro del Foro de Sao Paulo quedó claro el respaldo a gobiernos víctimas de agresiones internas y externas, entre ellos los de Venezuela y Nicaragua, y el rechazo al bloqueo de Estados Unidos contra Cuba y a la persecución de líderes populares.

Durante las tres jornadas del cónclave, retumbó la demanda de libertad del expresidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, cuyo encierro calificaron de injusto.

La depuesta mandataria de Brasil Dilma Rousseff y la presidenta del Partido de los Trabajadores de ese país, Gleisi Hoffmann, denunciaron en diversos espacios del encuentro la injusticia cometida contra Lula y advirtieron sobre el temor de la derecha a que el dirigente triunfe en los comicios de octubre.

Hoffmann declaró a Prensa Latina que la solidaridad resulta clave para lograr la liberación del exmandatario, fundador -junto a Fidel Castro- del Foro de Sao Paulo, en 1990.

También abundaron las muestras de respaldo al exjefe de Estado ecuatoriano Rafael Correa, quien en un videomensaje recordó la cruzada en su contra y acusó al presidente Lenin Moreno de traicionar a la Revolución Ciudadana.

La reunión en el Palacio de Convenciones contó con la participación de líderes revolucionarios y progresistas, entre ellos el primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC), Raúl Castro, y los presidentes de la isla, Miguel Díaz-Canel; Venezuela, Nicolás Maduro; Bolivia, Evo Morales; y El Salvador, Salvador Sánchez Cerén.

Igualmente acudieron a la vigésimo cuarta edición del Foro de Sao Paulo los exmandatarios Dilma Rousseff y Manuel Zelaya, y el luchador independentista puertorriqueño Oscar López Rivera.

Díaz-Canel, Maduro, Morales y Sánchez Cerén insistieron en sus discursos en la urgencia de la unidad de la izquierda y de los sectores contrarios al neoliberalismo, una postura ratificada en las palabras de clausura del encuentro por el segundo secretario del Comité Central del PCC, José Ramón Machado Ventura.

HOMENAJE A FIDEL CASTRO

En su tercera y última jornada, el XXIV Encuentro del Foro de Sao Paulo rindió tributo al líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, ocasión en la que se destacó la vigencia de su legado.

Para Evo Morales, el mejor tributo a Fidel es materializar la unidad latinoamericana y caribeña y no claudicar, mientras Maduro resaltó el compromiso del líder con la defensa de la justicia social y la dignidad de los pueblos.

Por su parte, Sánchez Cerén advirtió que el pensamiento de Fidel Castro seguirá marcando el rumbo del trabajo de los hombres y las mujeres de izquierda en América Latina.

En la intervención final de la plenaria dedicada a recordar a Fidel Castro, el presidente de Cuba llamó a apostar por la unidad en la región, para lo cual consideró fundamental tener en cuenta el ideal integracionista del líder de la Revolución que triunfó el 1 de enero de 1959.

Fidel Castro nos recordó que Revolución es unidad, y que es esta una de las claves para entender cómo hemos encarado con éxito agresiones externas de todo tipo, subrayó Díaz-Canel.

Prensa Latina


Declaración final del XXIV encuentro del Foro de Sao Paulo, realizado entre el 15 y 17 de julio 2018 en La Habana, Cuba

1- América Latina y el Caribe viven hoy, 28 años después de haberse fundado el Foro de Sao Paulo, los efectos de una multifacética ofensiva reaccionaria, conservadora y restauradora neoliberal, fruto de intereses convergentes y de esfuerzos combinados entre las élites mundiales del capitalismo transnacional, del gobierno de los EE.UU. como su núcleo hegemónico, y de las clases dominantes aliadas de nuestra región.

2. Esta multifacética ofensiva, ha logrado hacer retroceder a las fuerzas de izquierda y progresistas, mediante el derrocamiento de gobiernos, los golpes parlamentarios y judiciales. La derecha imperial y las oligarquías subordinadas han amplificado para ello los errores y las limitaciones de las fuerzas transformadoras, que sufren reveses y a la vez poseen inmensas potencialidades de lucha. Ello explica en un grado fundamental el cambio adverso en la correlación coyuntural de fuerzas imperante.

Examinar el carácter y la profundidad de los errores e insuficiencias, corresponderá de forma soberana a los partidos políticos y a los movimientos sociales de cada país.

3. El golpe militar y parlamentario contra Zelaya, en Honduras (2009); el golpe parlamentario dado a Lugo, en Paraguay (2012); la derrota electoral de Cristina Kirchner, en Argentina (2015); el Impeachment contra Dilma Rousseff en Brasil (2016), mediante un “golpe parlamentario, judicial y mediático; la victoria de figuras de derecha conservadoras o ultraconservadoras en Chile, Paraguay y Colombia; la condena sin pruebas y prisión de Lula para impedir su candidatura a la presidencia de la Republica del Brasil; las divisiones ostensibles en el campo popular a la hora de encarar las agendas neoliberales restauradas; la descalificación de la política que en importantes países de la región favorecen los planes de la derecha, y el fortalecimiento público de figuras y proyectos de raíz fascista en varios países, constituyen, entre otros muchos, indicadores de la ofensiva neoliberal, que las fuerzas de izquierda están desafiada a revertir a favor de los pueblos.

4. La actuación de la derecha guarda relación directa, con la naturaleza expansionista y depredadora del capitalismo, y con los intereses del capital financiero que lo dominan.

5. Los hechos hablan: entre el último Encuentro del Foro de Sao Paulo (Managua/2017) y este de La Habana (2018), a nivel global se ahondaron los efectos negativos de la concentración de la propiedad, el poder y la riqueza en manos de una élite mundial decidida a imponer, a cualquier precio, mejores condiciones para elevar sus tasas de ganancia

6. Así lo confirman la destrucción de la naturaleza, con efectos negativos crecientes sobre el clima; las tentativas de privatización de los bienes públicos como el agua, la tierra y el petróleo y su uso predatorio por las trasnacionales; las tentativas de privatización de los fondos públicos; el ataque a los derechos laborales y sociales; el incremento insultante de la inequidad y la desigualdad; la destrucción de fuerzas productivas mediante la guerra para animar las economías llamadas centrales; la multiplicación de los flujos migratorios y del sufrimiento que millones de seres humanos padecen al verse obligados a emigrar, y la ofensiva que desarrollan los intereses transnacionales contra la soberanía nacional de nuestras naciones, a fin de facilitar el libre movimiento de los capitales.

7. Estas realidades, agravadas por el peligroso desempeño de la Administración Trump, que busca revertir la tendencia declinante de la hegemonía norteamericana, multiplican los riesgos para la paz mundial y el estatus de América Latina y el Caribe como Zona de Paz. América Latina y el Caribe seguirán siendo prioridad para la política exterior estadounidense, cuyo dominio es de vital importancia en su afán por mantener un insostenible orden mundial unipolar.

8. Los Estados Unidos y sus aliados necesitan consolidar la percepción de que la historia continental entró en una fase regresiva imparable a favor del capitalismo. Aunque la reacción contra los gobiernos progresistas y de izquierda fue inmediato, debido al descredito y el debilitamiento extremo de los partidos políticos de derecha utilizados para imponer la reestructuración neoliberal, los inhabilito como instrumentos capaces de descarrilar las transformaciones sociales impulsadas, según el caso, por los movimientos políticos del Foro de Sao Paulo. De ahí la necesidad de recurrir a la estrategia desestabilizadora que combina la guerra mediática, jurídica y económica, la injerencia externa y la criminalización del movimiento y la protesta social, entre otros, que sirven a los golpes de nuevo tipo (judicial o parlamentario) o la derrota electoral.

Ante esta reacción del imperialismo y las oligarquías locales contra las fuerzas progresistas, rechazamos la idea del “fin de ciclo” con la misma firmeza y convicción con que en su momento lo hicimos con la del “fin de la historia”. Las fuerzas progresistas de América Latina seguiremos luchando por horizontes de un mundo basado en la justicia social.

La Casa Blanca y sus aliados buscan lograr exactamente lo contrario: dividir, cooptar, desmovilizar y generar desánimo. Es razón suficiente para que impongamos con hechos e ideas los verbos de la unidad de la izquierda y el campo popular para organizarse y luchar.

9. Preservar las experiencias de soberanía, de ampliación de la democracia, de gobierno de carácter popular y con proyecciones antiimperialistas, impulsadas por partidos de izquierda y progresistas; ofrecer apoyo decidido y estimular los esfuerzos emancipatorios y los ideales anticapitalistas de los movimientos sociales y populares que así actúan; trabajar con denuedo por consolidar una paz duradera con justicia social e impulsar esfuerzos que permitan avanzar en la integración soberana de la que Martí llamó Nuestra América, se transforman en imperativos políticos y en pruebas de honor para la izquierda continental.

10. Como en 1990, cuando emerge como espacio de concertación y construcción colectiva de la plural izquierda latinoamericana y caribeña, frente a una coyuntura internacional marcada por la incertidumbre y la desorientación que generó la desaparición de la URSS y el llamado campo socialista, el Foro de Sao Paulo siguiendo su tradición de reflexión critica y formulación política se ve de nuevo ante el desafío de examinar con mirada crítica el camino andado, reunificar fuerzas y hacer renovados esfuerzos para seguir construyendo los consensos que exige la ofensiva de la derecha en curso.

11. Los partidos políticos miembros del Foro de Sao Paulo llegan a este XXIV Encuentro con un acumulado político superior, que a su vez se ve multiplicado por la acción articuladora del Foro y, con plena conciencia de la imposibilidad del capitalismo depredador para ofrecer alternativas a la humanidad, lo que genera la rebeldía popular y potencialidades para la acción transformadora del progresismo y la izquierda, si esta se reorganiza, actúa al lado de los movimientos sociales, prepara cuadros y mejora sus proyectos de cambio, algunos de clara orientación socialista. Existen suficientes ejemplos en la historia latinoamericana y caribeña que prueban que cuando hay unidad, dirección política decidida y capaz, objetivos claros de lucha y moral de combate, y arraigo en las clases populares, se multiplican las opciones para contener cualquier ofensiva contra revolucionaria, conservadora y restauradora neoliberal, incluso más, para vencerla.

12. Ceder al derrotismo; auspiciar o tolerar los personalismos y sectarismos que emergen y proliferan en épocas de reveses; aceptar o promover la pérdida de confianza en la capacidad política de nuestros pueblos explotados, no solo sería hoy una afrenta a los héroes y mártires de las luchas por la emancipación del continente, sino una concesión gratuita e innecesaria a los EE.UU. y sus aliados internacionales y locales.

13. Frente al plan del imperialismo por socavar la soberanía de nuestras naciones y tomar control de sus recursos naturales, opongamos con auténtico espíritu internacionalista latinoamericano y caribeño, con firmeza e innegociable sentido de dignidad, el plan emancipador de nuestros nobles pueblos.

14. Trabajemos por fortalecer las luchas por la justicia y emancipación social, por plena soberanía política e independencia económica, por la soberanía de los pueblos y la paz mundial. ¡Reivindicar las mejores experiencias emancipatorias de los movimientos sociales y populares de la región!

En este contexto, los delegados y delgadas e invitados e invitadas al XXIV Encuentro del Foro de Sao Paulo, desde La Habana, Cuba, en representación de América Latina y el Caribe, de Asia y África, de Europa y América del Norte:

1. Convocamos a fortalecer el movimiento mundial en defensa de la Paz. La realidad impone sumar fuerzas para presionar, por todos los medios posibles.

2. Advertimos que los representantes del gran capital transnacional – gubernamentales y privados, militares y económicos, mediáticos e ideológicos – están operando con niveles de concertación superiores a los que conocemos. Concluimos, por tanto, que se impone un ejercicio práctico del internacionalismo mutuo entre todas las fuerzas de izquierda de América Latina y el Caribe, Asia, África, Europa y América del Norte.

3. Observamos con preocupación cómo la derecha imperial opera de forma concertada en el Consejo de Seguridad de la ONU; a favor del sionismo en Medio Oriente; para cercar militarmente a Rusia en Eurasia; para impedir que la República Popular China, en Asia, continúe su avance como potencia económica mundial con propuestas de paz y cooperación; para destruir, en América Latina, los proyecto de justicia social, democráticos y de internacionalismo latinoamericano y caribeño que impulsan nuestras fuerzas políticas; y para fragmentar el Caribe mediante distintas fórmulas, incluidas las coloniales como Puerto Rico.

4. Ratificamos la vigencia de las siguientes causas y líneas de actuación reivindicadas por el XXIIIEncuentro del Foro de Sao Paulo, efectuado en Managua el pasado año:

– Convertir la defensa de la CELAC, mayor acontecimiento unitario de los últimos 200 años, en objetivo político prioritario a promover por todos nuestros partidos, movimientos sociales y populares, desde cada escuela, universidad o espacio de creación intelectual. Sembrar la idea integracionista en la conciencia de nuestros pueblos, ya de por sí será un avance frente a la política divisionista impulsada por los Estados Unidos y sus aliados. Confiamos en el valor de las ideas justas: aseguremos que ellas sean escuchadas por cada uno de los gobiernos de Nuestra América.

– Transformar en objetivo de toda la izquierda y de los sectores patriotas y demócratas de América Latina y el Caribe, la defensa intransigente de los presupuestos de la Proclama de América Latina como Zona de Paz.

– Repudiar el militarismo nacido de las entrañas del Imperialismo, que carece de límites y de escrúpulos, es una necesidad política, ligada a la sobrevivencia de nuestros pueblos. Dar forma concreta a este repudio, en cada acción política cotidiana, es una cuestión de principios que ratificamos.

– Rechazar de forma enérgica, la idea absurda e inadmisible de que esta región del mundo pertenece a las élites de poder de los Estados Unidos o de cualquier país del mundo. Que cada día sea para la Casa Blanca un recuerdo concreto de lo afirmado por la II Declaración de La Habana: “… esta gran humanidad ha dicho ¡Basta! y ha echado a andar. Y su marcha de gigantes ya no se detendrá hasta conquistar la verdadera independencia…”.

– Concertar en cada espacio internacional que lo permita, por encima de diferencias subalternas de tipo nacional o sectorial, toda acción que debilite los niveles de dominación y hegemonía de los Estados Unidos en nuestros países, es esencial y posible. El Imperio ha optado por priorizar los componentes de la guerra cultural y de símbolos. Rescatemos, como respuesta ofensiva, las tradiciones de libertad de cada uno de nuestros países. Honremos a los que las forjaron. Impidamos que la banalidad cultural del Norte que nos desprecia, se imponga sobre la rica historia de los países que representamos.

– Conocer con rigor cómo está desarrollando la derecha internacional sus planes de desestabilización, contra las experiencias de gobierno y populares de carácter emancipatorio en América Latina y el Caribe, constituye una necesidad de primer orden. Ello será más eficaz si creamos un sólido sistema de intercambio de informaciones y experiencias colectivas. El Foro de Sao Paulo puede jugar en este campo un papel central, en particular haciendo esfuerzos en la formación política.

– Al igual que los delegados al XXIII Encuentro de Managua, por entender que se trata de causas vigentes:

– Reafirmamos la importancia del acercamiento y la acción concertada entre la izquierda de Europa y la de América Latina y el Caribe. Nos comprometemos en esta nueva etapa a tornar más sistemático y eficaz la acción antiimperialista unitaria entre ambas regiones. El PIE y el Foro de Sao Paulo están en condiciones de posibilitar este objetivo.

– Denunciamos, esta vez con razones adicionales, el papel injerencista de la OEA, que sigue siendo utilizada por el gobierno de los Estados Unidos como su Ministerio de Colonias. La actuación de su secretaría general, marcada por una despreciable supeditación a los intereses de la Casa Blanca, así lo prueba todos los días. La OEA, junto al Grupo de Lima, constituyen los Caballos de Troya actuales contra la unidad latinoamericana y caribeña. Hagamos todo lo posible para impedir que continúen su avance destructor.

– Condenamos la guerra no convencional y de amplio espectro, aplicada por el imperialismo yanqui y sus aliados europeos, latinoamericanos y caribeños contra la Revolución Bolivariana. Esta se ha convertido para la Casa Blanca en el objetivo estratégico inmediato a derrotar. Sea para nosotros, por tanto, el objetivo mayor de solidaridad en estas circunstancias. Como hace un año atrás, en Managua, el Foro de Sao Paulo se mantiene en estado de alerta y en sesión permanente de solidaridad internacionalista contra la intervención internacional hacia Venezuela.

– Mantenemos intacta la solidaridad con lo(as) argentinas(os) y brasileñas(os), hondureñas(os) y paraguayas(os) que se resisten a aceptar el retroceso al neoliberalismo en sus respectivos países, luego de experiencias de gobierno que, por caminos propios, buscaron el crecimiento económico, la mejor redistribución de la riqueza, la garantía de derechos sociales, la ampliación de la participación popular y la democracia, asegurar la soberanía nacional y fortalecer la integración regional en el ámbito de los BRICS, todo para combatir las desigualdades sociales, regionales y de genero, el racismo, o que, simplemente, retaron por su política exterior la lógica hegemonista de la política exterior de los Estados Unidos.

– Reafirmamos nuestra absoluta convicción de apostar por la paz, en concordancia con la Declaración de la CELAC, que en enero de 2014 declaró América Latina como zona de paz. Por eso, respaldamos el pedido de las fuerzas políticas y sociales de Colombia para que el gobierno colombiano cumpla con la implementacion de los Acuerdos de la Habana, mantenga abierto el proceso de dialogo con el ELN y de pasos certeros para acabar con el asesinato de ex combatientes y lideres sociales, políticos, ambientales y defensores de DDHH. Denunciamos las acciones de la ultraderecha nacional e internacional para boicotear la Paz. Es evidente que la Casa Blanca, el sionismo internacional y las fuerzas más retrógradas del continente, persisten en lograr que los grupos oligárquicos de Colombia sigan siendo tropa de choque a favor de los intereses transnacionales en América del Sur. Es vital la lucha contra esta estrategia, que ya colocó a uno de los países de la CELAC como miembro de la agresiva OTAN.

– Rechazamos de forma enérgica la política intervencionista de los Estados Unidos en los asuntos internos de la Nicaragua sandinista, país en el que se está implementando la fórmula que viene siendo aplicada por el imperialismo norteamericano a los países que no responden a sus intereses hegemónicos, causando violencia, destrucción y muerte mediante la manipulación y la acción desestabilizadora de los grupos terroristas de la derecha golpista, que boicotean la búsqueda del diálogo, el cual constituye el mejor camino para superar la actual crisis y alcanzar la paz, lo que es indispensable para la continuación del proceso de transformaciones sociales impulsado por el FSLNdesde el gobierno presidido por el Comandante Daniel Ortega y que ha reducido de manera notable la pobreza y la desigualdad social en ese hermano país.

– Nos solidarizamos con el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional y con el gobierno del compañero presidente Salvador Sánchez Cerén, que enfrentan con energía la guerra mediática, la guerra jurídica, el boicot económico y otras formas de desestabilización, y nos comprometemos a acompañarlos como observadores internacionales en la elección presidencial del 3 de febrero de 2018.

– El XXIV Encuentro del Foro de Sao Paulo convoca y alienta a Bolivia y Chile a encontrar, cuidando las sensibilidades de ambos países, una salida al enclaustramiento marítimo boliviano en base al diálogo y el derecho internacional, y que contribuya a una verdadera integración de nuestros pueblos.

– Renovamos el rechazo del Foro de Sao Paulo a la política de la Casa Blanca, que criminaliza a los emigrantes latinoamericanos y caribeños y, de manera particular, a los hermanos centroamericanos. Un mundo sin fronteras y con ciudadanía universal es el norte de nuestra lucha emancipatoria.

– Rechazamos cualquier forma de racismo, intolerancia y discriminación. Impulsamos el ejercicio pleno de los derechos económicos, culturales, sociales y políticos de las mujeres, y la eliminación de la cultura patriarcal.

– Demandamos la retirada de las fuerzas de la MINUSTAH que, siguiendo un mandato del antidemocrático Consejo de Seguridad de la ONU, mantienen ocupado Haití desde hace más de una década.

– Condenamos el narcotráfico, el tráfico de personas y el terrorismo, y denunciamos la doble moral de un sistema que dice combatir al crimen organizado, mientras protege a sus grandes promotores y principales responsables. Defendemos el cultivo legal y el uso tradicional benéfico de la hoja de coca.

– Proclamamos el acceso al agua como derecho humano y los demás bienes comunes (tierra, aire puro, energía etc.,) luchamos contra la depredación del medio ambiente, la amenaza a la biodiversidad y al ecosistema en general.

– Apoyamos las exigencias de los pequeños Estados insulares del Caribe a ser resarcidos por los daños humanos de la esclavitud y a acceder a recursos que permitan su resiliencia frente al cambio climático.

– Demandamos el levantamiento incondicional, total y definitivo del bloqueo económico, financiero y comercial del gobierno de Estados Unidos contra Cuba, y la indemnización al pueblo cubano por los daños y perjuicios causados por más de medio siglo de agresiones de todo tipo.

– Exigimos la devolución al pueblo de Cuba del territorio ocupado por la ilegal base naval estadounidense en Guantánamo.

– Apoyamos el reclamo histórico de Argentina sobre la soberanía de las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur.

– Exigimos la eliminación de todas las bases militares estadounidenses que existen en la región (77en total, que junto a la IV Flota, cubren todo el espacio regional), y de todas las bases militares extranjeras de cualquier país, dondequiera que se encuentren.

– Defendemos los derechos y las culturas de los pueblos originarios y afrodescendientes, y asumimos sus luchas para la restitución y ejercicio pleno de sus derechos históricos.

– Demandamos la descolonización total del Caribe y apoyamos de manera particular la independencia de Puerto Rico, al conmemorarse el 25 de julio de 2017, ciento veinte años de la invasión militar estadounidense contra esta nación caribeña. Asimismo, nos pronunciamos por la eliminación de toda forma de coloniaje y neocoloniaje.

– Respaldamos, en apego a la autodeterminación de los pueblos, la postulación del presidente Evo Morales habilitado constitucionalmente y respaldado por la Convención Americana para las elecciones de 2019, y rechazamos los planes desestabilizadores impulsados por la derecha de ese país, la OEA y la embajada de Estados Unidos.

– Exigimos la libertad inmediata de Lula, después de una condena y prisión sin pruebas y el derecho a ser candidato presidencial en las elecciones de octubre en Brasil, respetándose la voluntad de la mayoría del pueblo brasilero.

Lula Live! Lula Inocente! Lula Presidente!

5. Como hace un año atrás, ratificamos que América Latina y el Caribe siguen en pie de lucha!. Y mantienen la decisión de actuar con optimismo, decisión y mayor sentido unitario.

¡Hasta la Victoria Siempre”

ALBA Movimientos


Saluda Evo apoyo de Foro de Sao Paulo a su postulación en 2019

El presidente boliviano, Evo Morales, saludó el apoyo del XXIV encuentro del Foro de Sao Paulo a su postulación para un nuevo mandato en las elecciones de 2019 en este país.

En un mensaje en su cuenta de Twitter, el mandatario agradeció este respaldo de la izquierda latinoamericana plasmado en la Declaración de La Habana.

Saludamos la resolución del XXIV Foro de Sao Paulo, que apoya la postulación constitucional de autoridades por autodeterminación de los pueblos respaldada por la Convención Americana. En democracia, será el pueblo que decida dar continuidad al crecimiento económico y mejorar lo avanzado, escribió.

Morales también agradeció que en el documento final de ese encuentro se aliente a Bolivia y a Chile a encontrar una solución a la mediterraneidad boliviana en base al diálogo y el derecho internacional.

Agradecemos resolución del XXIV Encuentro del Foro de Sao Paulo que convoca a Chile y Bolivia a encontrar una salida al enclaustramiento marítimo con diálogo y respeto al derecho internacional para la integración de nuestros pueblos. El fallo de La Haya debe unirnos, no dividirnos, enfatizó el jefe de Estado en otro tweet.

La víspera, los participantes del XXIV encuentro del Foro de Sao Paulo, cerraron la cita con una declaración que, entre otros temas, apoyan la postulación del mandatario boliviano, Evo Morales, para las elecciones generales de 2019, e instan a resolver pacíficamente el diferendo marítimo chileno-boliviano.

El Foro de Sao Paulo es un espacio de convergencia, debate y acción conjunta nacido del Encuentro de Partidos y Organizaciones Políticas de Izquierda de América Latina y el Caribe celebrado en 1990 con el auspicio del Partido de los Trabajadores de Brasil.

Su XXIV encuentro se desarrolló del 15 al 17 de julio en La Habana, Cuba, país que acogió dos ediciones anteriores de la cita: la de 1993 y la de 2001.

Prensa Latina


Maduro resalta en Foro de Sao Paulo legado de Fidel Castro

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, resaltó en el XXIV Encuentro del Foro de Sao Paulo el legado de resistencia y lucha de Fidel Castro.

En una plenaria dedicada al pensamiento del líder histórico de la Revolución cubana -en la jornada final del encuentro de tres días- el mandatario destacó el compromiso de Fidel con la unidad y la defensa de la justicia social y la dignidad de los pueblos.

Maduro mencionó también en el Palacio de Convenciones de La Habana el ejemplo del líder cubano (1926-2016) de cara a la construcción de proyectos marcados por la justicia, la democracia y la dignidad, más allá de cómo se llamen esos procesos.

En su intervención, el dirigente venezolano abordó la situación de su país, sometido a una agresión interna y externa, con el gobierno de Estados Unidos como protagonista, cruzada que incluye el peligro -denunció- de agresión militar.

Hemos resistido la violencia y los embates del más poderoso imperio, dijo Maduro, quien recordó el interés de los centros de poder, y en particular de Washington, en apoderarse de los grandes recursos de la nación sudamericana, entre ellos el petróleo y el oro.

Asimismo, advirtió que el imperio se plantea destruir el ejemplo transformador de la Revolución Bolivariana.

El líder socialista aseguró que Venezuela resistirá los ataques y mantendrá la paz.

En nuestro país seguirá triunfando la paz con patria, con justicia y con independencia, sentenció.

Maduro aprovechó su discurso en el XXIV Encuentro del Foro de Sao Paulo para expresar solidaridad con Nicaragua y rechazar la violencia que se ha impuesto al país centroamericano.

De igual manera repudió el encarcelamiento del expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, postura acompañada por el reclamo de ‘Lula libre’ por los más de 600 delegados presentes en el Palacio de Convenciones.

También los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, intervinieron en la plenaria para destacar los aportes de Fidel Castro a la unidad de las fuerzas progresistas y de izquierda, y a la integración latinoamericana y caribeña.

Cuba Sí


Mensaje de Correa: Los principales partidos a los que se enfrenta la región hoy son los medios de comunicación que están en manos de las élites

El expresidente de Ecuador Rafael Correa, víctima de la persecución judicial, instó a la izquierda latinoamericana a continuar la lucha más unidos que nunca, y a no dar un paso atrás ante las amenazas que se ciernen sobre la región.

En un mensaje televisado a la sesión de clausura del XXIV Encuentro del Foro de Sao Paulo, el líder ecuatoriano domiciliado en Bélgica desde hace un año, expresó la confianza en que los movimientos progresistas vencerán ante las acciones desestabilizadoras en varias naciones del área.

Correa denunció los hechos de judicialización de la política en Brasil, con el caso del encarcelado exmandatario Luiz Inácio Lula Da Silva; y en su país, con la detención del vicepresidente constitucional Jorge Glas.

El gobernante de Ecuador por 10 años (2007-2017), criticó la cooptación de todos los poderes del Estado, la justicia, el Consejo Nacional Electoral, la corte constitucional y otras instituciones de esa nación, “todo para perseguir a Correa”.

Argumentó que varios procesos penales de los cuales es víctima son “los más ridículos en este caso de secuestro”, y que actualmente se encuentra bajo prisión preventiva, ante la obligación de viajar cada 15 días desde Bélgica a Ecuador, “un imposible que no podría cumplir”, detalló.
Correa pidió que no se preocupen por su situación, “yo estoy seguro”, preocúpense por la Patria, “porque se la están llevando en peso”.

Estamos siendo víctimas de la peor corrupción, del uso del poder político para defender intereses privados, aseguró el exdignatario, quien se disculpó ante su pueblo, la Patria y la izquierda mundial, por cometer el error de confiar “en lobos disfrazados de corderos” que traicionaron a su país.

Me siento responsable de lo que ha pasado, expresó, y adicionó que hubiera sido mejor que ganara la derecha, porque eso los uniría.

Correa añadió que los principales partidos a los que se enfrenta la región hoy son los medios de comunicación que están en manos de las élites.
La izquierda que no entienda eso no ha comprendido nada, el cambio en nuestra América pasa por el cambio de la propiedad y orientación de esos medios para que no manipulen y no persigan, insistió.

El mensaje de Correa fue escuchado con atención por más de 600 participantes de 55 naciones, quienes representan partidos, movimientos y organizaciones políticas del área, África, Asia y Europa.

Cuba Sí

Más notas sobre el tema